Pou-pourrait de reflexiones sobre cualquier tema de actualidad. El autor no garantiza tener mucha idea sobre lo que está hablando.

6.11.06

Habemus tripartitum

Bueno, como todo blogger friki de la política que se precie, no podía dejar de escribir sobre las recientes elecciones de la futura república independiente de Polonia, celebradas hace unos días.

La primera impresión que tuve al ir siguiendo los resultados es que los catalanes se podrían haber ahorrado votar. Realmente los resultados han quedado calcados a los de 2003, escaño arriba, escaño abajo. Hay pequeñas diferencias: Mas podrá darse golpes en el pecho señalando que ha ganado el voto popular y poco más, porque parece que le va a tocar seguir chupando banquillo. Piqué, por su parte, ha pasado de ser un cero a la izquierda con 15 escaños a ser un cero a la izquierda con 14 escaños. No se si es para estar orgulloso, pero ya se sabe que después de unas elecciones suele pasar que nadie ha salido derrotado (salvo los que dimiten, que sino ya sería una tomadura de pelo excesiva). PSC y ERC, como miembros del tripartito más aficionados a hacer el gilipollas, han perdido algunos escaños que ha ganado su socio más serio, ICV, y siguen pudiendo reeditar el tripartito. Finalmente han entrado en escena Ciutadans, partido del que media Cataluña espera que se definan políticamente más allá del tema lingüístico y de los detallitos flowerpower rollo regeneración de la democracia y paz mundial.

De todas maneras las dudas sobre quien iba a gobernar no se han alargado mucho. Después de que Montilla le hiciera un soberano corte de mangas a Mas y se desvaneciera la opción socioconvergente, quedaban como posibilidades el pacto CiU + ERC y el tripartito, que parece que ha sido la opción ganadora. Ahora nos esperan unos añitos de diversión (aunque Carod, metido en su particular versión de los buenos propósitos de año nuevo, ha dicho que se va a portar bien), mientras que la caverna mediática podrá seguir rasgándose las vestiduras. Que lo disfruten.

PD: mucho juntaletras a sueldo anda señalando a la abstención como si fuera el cáncer terminal de la democracia, y nada más lejos de la realidad. Todas las sociedades democráticas tienden, con el tiempo, a una mayor abstención y a una mayor estabilidad del electorado. Mañana en EEUU darán saltos de alegría si llegan a un 40% de participación, y seguro que nadie hará sangre por ello.